Mantener un nivel adecuado de vitamina B3 en el organismo es fundamental para lograr una buena salud. El uso de dosis altas de niacina se recomienda como tratamiento para mejorar los niveles del colesterol, cuando están elevados y así disminuir el riesgo de enfermedad cardiovascular.
La niacina y la niacinamida son formas de vitamina B3, la cual es necesaria para el funcionamiento normal de las grasas y los azúcares en el cuerpo y para mantener a las células sanas.
Puedes encontrar estas sustancias en diferentes alimentos incluyendo verduras verdes, leche, cereales, levadura, semillas de girasol, atún, hígado de res, huevos y carne. También se encuentran en la mayoría de los suplementos del complejo de la vitamina B. Son solubles en agua y se absorben fácilmente cuando se toman por vía oral.
Generalmente los requerimientos de Vitamina B3 se cubren a través de una buena alimentación, pero también existen suplementos en varias presentaciones que pueden llegar a ser útiles.
La deficiencia leve de niacina puede producir fatiga y llagas en la boca, pero una deficiencia severa desencadena una condición llamada pelagra, la cual produce trastornos en la piel, diarrea y depresión y, en casos severos, demencia. La pelagra era común a principios del siglo veinte, pero en la actualidad ya casi no existe debido a que bastantes alimentos están enriquecidos con niacina.
Las personas con una dieta sumamente pobre, con alcoholismo y con algunos tipos de tumores llamados tumores carcinoides tienen mayor riesgo de tener deficiencia de niacina.
Para que el organismo funcione bien, todos los seres humanos necesitamos vitamina B3 –ya sea a través de la comida o de suplementos-, pero en diferentes cantidades dependiendo de la edad, el sexo y las condiciones médicas. Antes de tomar suplementos de vitamina B3, consulta con tu médico acerca de la dosis adecuada para ti y si realmente necesitas tomar suplementos. En dosis altas puede llegar a ser tóxica.
¿Qué dice la ciencia?
Los estudios han encontrado que la niacina probablemente es eficaz para bajar el colesterol elevado en la sangre. Sin embargo, debes saber que la niacinamida no funciona en este caso, sólo la niacina. Debido a que se requieren dosis altas de niacina con este objeto, es muy importante que consultes con tu médico. Por otro lado, varios estudios sugieren que podría elevar la concentración de homocisteína que podría tener efectos negativos en el sistema cardiovascular y que es conveniente combinar la niacina con otros medicamentos cuando se tiene el colesterol elevado. Nuevamente, por eso es importante que consultes con tu médico antes de tomarla.
También es eficaz para el tratamiento y la prevención de la deficiencia de vitamina B3, en este caso tanto la niacina como la niacinamida son efectivas, por lo tanto, ambas son de gran ayuda para tratar la pelagra.
Existe evidencia de que la niacina probablemente es útil en el tratamiento de la arterioesclerosis (endurecimiento de las arterias) , también parece disminuir el riesgo de un segundo ataque al corazón en hombres con trastornos del corazón y circulatorios, así como para la prevención de cataratas y en la degeneración macular relacionada con la edad, Sin embargo se necesitan más investigaciones para confirmar su eficacia en estos campos.
También se ha utilizado para el tratamiento del Alzheimer. Sin embargo la evidencia científica no es muy clara para este uso y todavía no existe evidencia que indique que el tomar un suplemento de niacina produzca algún beneficio en la prevención de esta enfermedad.
Algunos estudios sugieren que la niacinamida es útil para tratar la osteoartritis, pues parece aumentar la flexibilidad de las articulaciones y disminuir el dolor. Aún así, se requieren más investigaciones sustentadas que afirmen estos beneficios.
Por otro lado, no existe suficiente evidencia científica en este momento para determinar que la vitamina B3 en cualquiera de sus formas, sea verdaderamente eficaz para tratar la migraña, la depresión, los mareos causados por movimiento, el acné, la dependencia del alcohol o el trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH).
¿Qué tan segura es?
La niacina y la niacinamida son seguras para la mayoría de las personas cuando se administran por vía oral en las dosis adecuadas. A pesar de ello, un efecto secundario común de la niacina puede ser el enrojecimiento de la piel, lo cual podría causar hormigueo, comezón y enrojecimiento de la cara, los brazos y el pecho, así como dolor de cabeza. Frecuentemente, éstas reacciones desaparecen a medida que el cuerpo se acostumbra al medicamento, pero ten en cuenta que el consumo de alcohol puede empeorarlas. Y los productos que se liberan lentamente tienden a producir este efecto secundario con menor frecuencia que los que se liberan más rápidamente. Evita tomar cantidades elevadas de alcohol mientras estés bajo tratamiento con niacina.
Otros efectos secundarios de la vitamina B3 pueden ser molestias estomacales, gas intestinal , diarrea, palpitaciones y mareos. Típicamente estos efectos secundarios disminuyen a medida que la persona continúa tomando la niacina.
Si se toma niacina en dosis elevadas, pueden causar efectos secundarios más graves. Estos incluyen problemas hepáticos, gota, úlceras del tracto digestivo, pérdida de visión, una elevación del azúcar en la sangre y latidos irregulares del corazón. Es importante suspenderla 2 semanas antes de un cirugía ya que puede bajar en nivel de azúcar en la sangre.
Precauciones e interacciones:
Mientras algunos dicen que la vitamina B3 es segura durante el embarazo y la lactancia, en las dosis sugeridas, siempre debes consultar con tu médico antes de tomarla.
Si padeces alergias, es importante que consultes a tu médico sobre el uso de la niacina y la niacinamida, ya que pueden aumentar la severidad de los síntomas de alergia, debido a que liberan histamina, la sustancia química que produce las manifestaciones de alergia.
Se debe usar con cuidado si se padecen enfermedades cardíacas. Las personas con diabetes, deben tener precaución al tomar niacina y niacinamida, ya que podrían aumentar el nivel de azúcar en la sangre. La niacina y la niacinamida en dosis elevadas podrían producir un ataque de gota. Si padeces presión arterial baja, no debes tomar niacina o niacinamida, ya que se puede bajar demasiado.
Las personas con enfermedades hepáticas (del hígado) deben ser especialmente cuidadosas si toman niacina o niacinamida, debido a que pueden dañar el hígado. No se debe usar si tienes enfermedad renal (del riñón), pues la niacina se podría acumular y lesionar el riñón también.
Si padeces úlceras estomacales o intestinales, evita el uso de la vitamina B3 debido a que podría empeorar las úlceras.
Debes tener precaución al combinar la vitamina B3 con las siguientes sustancias:
- Alcohol, ya que puede aumentar el riesgo de producir enrojecimiento de la piel y comezón.
- Alopurinol, que se usa para el tratamiento de la gota. Consumir dosis elevadas de niacina puede empeorar la gota y disminuir la eficacia del alopurinol.
- Clonidina, una medicina para bajar la presión arterial. Junto con la niacina podrían disminuirla demasiado.
- Aspirina, ya que puede incrementar el riesgo de sangrado.
- Antibióticos como la tetraciclina, ya que la niacina interfiere con su absorción y su efectividad.
- Parche de nicotina, ya que junto con la vitamina B3, puede aumentar la posibilidad de causar enrojecimiento de la piel y mareo.
- Cromo, al tomarlo conniacina podría bajar el azúcar en la sangre.
- Algunas hierbas y suplementos si se toman junto con la niacina, podrían aumentar el riesgo de dañar el hígado. Entre ellos están: la hoja de borraja, el chaparral, la consuelda, la dehidroepiandrosterona (DHEA), el aceite de poleo y la levadura roja.
- La niacina junto con el Ginkgo Biloba incrementa el riesgo de sangrados.
- Evita consumir bebidas calientes junto con niacina ya que pueden producir enrojecimiento de la piel y picazón.
Aunque las vitaminas y los suplementos se venden sin receta, es importante que consultes a tu médico para que te asesore y te recomiende si te conviene tomara en tu caso particular ya que no sólo puede tener efectos secundarios e interacciones con otras hierbas, suplementos y medicamentos, en exceso pueden ser tóxicas.
Imagen © iStock / SuperflyImages
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