Recetas para la vida — ¿Qué haces cuando todo te sale mal?

Por Becky Krinsky

No existe sensación más increíble que la de obtener los resultados deseados. La satisfacción, felicidad, y el logro personal, son definitivamente la mejor recompensa. El éxito siempre tiene un sabor delicioso.

Después de  prepararte,  organizar y esperar, llega el momento anticipado, el instante que puede convertir tu trabajo en un triunfo; sin embargo lo único que escuchas son palabras como: No te preocupes la próxima será la buena, ten fe, recuerda que ya te llegara lo que buscas, no te desesperes, quizá esto no era para ti…

Tu por el otro lado te sientes defraudado, triste quizá hasta las esperanzas has perdido, sientes que lo que pudo ser un momento espectacular, se convirtió simplemente en un acto gris, invisible y en ocasiones hasta en una catástrofe, una memoria amaga con un mal sabor.

En realidad, todo radica en la actitud que  elijas en la historia que quieras recordar y en las acciones que se realicen a partir de lo que te sucede. La elección siempre es tuya aun cuando no lo parezca.

Pero, ¿qué haces cuando lo que esperabas no sale según tus planes, cuando sientes que tu trabajo no es valorado, cuando tu esfuerzo pasa desapercibido y en muchos casos sientes que hay una conspiración en tu contra?

David estaba listo para su primer debut oficial como concertista de chelo. Tras muchas horas de práctica, mucho esfuerzo y hasta grandes sacrificios familiares, todo estaba listo para e gran día. El traje heredado y arreglado, el instrumento rentado, la emoción y finalmente la esperanza de que el trabajo seria finalmente reconocido y quizá la suerte le mejorara, todo junto en un saco cargado de sentimientos encontrados, felicidad, miedo anticipación nervios, gratitud…

Cuando David llego al teatro, saco su gran chelo de su funda y lo comenzó a afinar, una rutina que ya tenía bien establecida. En el momento que comenzó a ajustar la cuerdas una repentinamente se rompió. Sin perder la calma, busco otra cuerda. Como es de esperarse, en esta ocasión no había traído un de respuesto. Curiosamente, la maestra no había llegado y nadie tenía otra cuerda para el instrumento. David no se preocupó mucho y dijo, “También sé tocar con una cuerda menos. No pasa nada. En el momento que volteó a ajustar su asiento, el chelo se le resbalo de las manos y, sin querer, se cayó y se rompió.

De repente se hizo un gran silencio. Los compañeros de David se quedaron inmóviles, su mamá angustiada y nerviosa, y nadie sabía qué hacer. Pobre David, la beca que tanto necesitaba se le estaba escurriendo de las manos y nada podía hacer.

Con toda calma David se recordó que en el teatro donde iba a tocar, había una sala con instrumentos viejos, así que fue a buscar al intendente para que le abriera la bodega. Encontró un chelo viejo y de muy mala calidad. Lo ajusto rápidamente y regresó a la sala de la presentación. David tocó con mucho trabajo. Quizá las notas no le lucían como él hubiera querido. Pero, definitivamente, el espectáculo fue un éxito y una buena lección para todos. David no se desesperó, no perdió la fe, buscó la manera de resolver sus percances y tocó como un verdadero maestro.

Lo que hubiera podido ser un desastre no lo fue. La calma y las ganas de encontrar solución a los problemas son buenos ingredientes.

Tú ¿qué haces cuando todo te sale mal?

 

La Receta:

“Superando obstáculos”

Ingredientes:

• 1 taza de calma;  análisis, objetividad y perspectiva
• 1 racimo de flexibilidad; facilidad de adaptación o cambio según se ocupe
• 2 tazas de FE; esperanza, confianza y entusiasmo reconocer la grandeza de la vida
• 1 cubito de disciplina; acciones concretas y ordenadas
• 3 gotas de fortaleza; no rendirse NUNCA, buscar el aprendizaje, cambiar la estrategia
• 1 pizca de creatividad; ingenio para encontrar soluciones adicionales

Recomendación del chef:  Para sobrepasar cualquier situación complicada hay que empezar por aceptar la realidad, actuar con calma, no perder el control y buscar posibles nuevas soluciones; lo importante es el resultado final. El camino puede tener complicaciones.

Modo de preparación:

1. Los obstáculos son maestros con pruebas necesarias para el crecimiento personal. Hay alturas a las que solo se llegan después de haber tenido una gran caída, de otra manera quizá hubiese sido imposible lograr el éxito y la fortaleza obtenida.
2. Superar la adversidad  fortalece la confianza, la fe y aumenta la estima. La resistencia aporta magnos beneficios que suman a las experiencias que sirven como herramientas para solidificar los valores, las convicciones y aumentar las potencialidades individuales.
3. La fe es la esencia de la paciencia y la confianza. Aceptar que no se tiene el control de los sucesos, aprender a dejar fluir, y concentrarse en lo que uno si puede hacer, da poder, posibilidades y un sentimiento de conciencia que llena de paz y tranquilidad.

La paciencia es el antitóxico del enojo y la frustración y la esencia del triunfo y la tranquilidad.

 

Actualización de una receta favorita originalmente publicada en el 2013.

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